El juicio contra el exsecretario de seguridad Genaro García Luna que inició este lunes en Estados Unidos, es un caso muy vergonzoso sobre un alto funcionario que debe darse a conocer, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Muy vergonzoso, se trata de un funcionario de alto nivel que estaba a cargo de la seguridad pública durante el gobierno de Calderón y que tenía una doble función, según las acusaciones que está haciendo el gobierno de Estados Unidos, que al mismo tiempo que se encargaba de la seguridad pública protegía a uno de los cárteles o de los grupos de la delincuencia organizada”, expresó durante su conferencia matutina de este martes.
Abundó sobre lo que ocurrió durante el primer día del juicio contra el brazo derecho de Felipe Calderón para combatir la delincuencia en su sexenio, en donde fue acusado de recibir millones de dólares a cambio de protección.
“Lo detienen hace como tres años, empiezan a recabar pruebas, a buscar testigos, a hacer la investigación por fin después de esos tres años se constituye el jurado para juzgarlo y ayer inicio el juicio.
“Sus abogados sostienen que es inocente, que quienes lo acusan no tienen pruebas y se están valiendo de testigos protegidos que tienen también antecedentes penales y fueron deportados a Estados Unidos y que eso es lo que están utilizando de pruebas. ‘Hasta ahora no ha habido pruebas’, así, fehacientes. Se habla también que acumuló una fortuna de muchísimo dinero, de alrededor de mil millones de dólares. Ayer el que lo acusa habla de que recibí un millón de dólares diarios”, mencionó López Obrador.
El primer testigo fue Sergio Villarreal Barragán, El Grande, quien aseguró que estuvo presente cuando se hacían pagos de sobornos a García Luna por parte del capo de la droga Arturo Beltrán Leyva.
A cambio, señaló el testigo, García Luna daba información sobre operaciones.
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