Escrita por José Eduardo Pardo, la obra de teatro “La bicicleta” es un breve y salpicado de humor acerca del sentido de la existencia, donde esa destartalada bicicleta al centro del escenario es una metáfora de la vida.
Mateo, interpretado por Manuel Sevilla, es un buscador de ilusiones y Joe, con Rodolfo Arias en su interpretación, es un castrador de sueños. Ambas concepciones de la vida se enfrentan en torno a una bicicleta; el primero está dispuesto a reconstruir la destartalada bicicleta que encontró y el otro, se empeña en convencerlo de que tal empresa no vale la pena.
“Es una obra corta, lo cual creo que al público le agrada mucho porque por las redes sociales y todas las distracciones actuales hemos ido perdiendo la paciencia de sentarnos durante largos tiempos en una sala y, más ahora con la pandemia, la gente no está muy segura de querer estar demasiado tiempo con demasiada gente”, dice Manuel Sevilla.
La pieza escrita por el dramaturgo y director venezolano radicado en Miami, José Eduardo Pardo y producida por Omar Baduy se presenta los jueves, hasta el 16 de diciembre en el Foro Alessa. Este es un espacio ubicado en la zona azul de Satélite (Circuito Economistas 109) que combina los conceptos de teatro-café, con una capacidad para 30 personas y que cumple con todas las medidas sanitarias que ofrece una experiencia única y cercana con el público.
Abrir este espacio al arte teatral y montar una obra luego de casi dos años de encierro a causa del Covid 19 es, a su modo, restaurar su propia bicicleta, explica Rodolfo Arias. Se trata, para el actor, de hacer teatro por el placer de hacer lo que les apasiona y compartir con gente como él que necesita retomar su vida, disfrutar, resignificarla.
Dice Manuel Sevilla que la pieza muestra a dos personajes antagónicos que viven en mundos completamente diferentes y tienen percepciones opuestas. “Por un lado está el personaje que interpreta Rodolfo Arias que es un hombre adinerado, celoso de su dinero y de su tiempo, engreído por su supuesta cultura y; por el contrario, Mateo es justamente el lado opuesto, es un hombre que se ha despojado de todo, del ego principalmente, de lo material y que ha recuperado las ilusiones, los sueños, el gusto por vivir, por respirar, cosa que la mayoría de los seres humanos hoy en día hemos ido dejando de lado al aprender a sobrevivir en esta vorágine que es el mundo actual”.
Añade que “La bicicleta” dura un poco más de 30 minutos que evidencia la posibilidad de reencontrarnos todos los seres humanos, de conectarnos con los instintos más elementales como son los sentimientos, los sueños, las ilusiones, el gusto por vivir y no solamente vivir para trabajar o para hacer dinero, controlar, dominar y, tener poder”.
Alessa Café abre sus puertas todos los jueves a las 20:00 horas para que el público se divierta con “La bicicleta” mientras disfruta de una bebida o un snack. Al terminar la pieza teatral se puede elegir una deliciosa cena en el jardín del espacio y disfrutar de la música en vivo a cargo de un grupo de blues.
Comentarios
0 comentarios