Con el título provocador “Have a drink on me” y una sensual fotografía en la que aparece cubierta sólo por dos vasos de cristal, la influencer, modelo y ex campeona de nado australiana Gabby Epstein aparece en la portada de la edición digital Playboy México correspondiente a noviembre y diciembre.
En la entrevista que acompaña las imágenes tomadas por el fotógrafo Clint Robert, Gabby Epstein rememora sus primeros pasos dentro de las redes sociales. Originalmente, ella sólo quería tener una cuenta de Instagram para compartir sus experiencias como viajera, pero cuando menos lo pensó, ya sumaba más de 1 millón de seguidores.
“Para empezar, yo no me dedicaba profesionalmente al modelaje o a la moda; sólo las utilizaba (las redes sociales) como una forma de mantenerme mientras estudiaba la universidad. Recibí una beca para estudiar Ciencias Biomédicas y me vi obligada a hacer malabares entre mis estudios y los viajes. Mi familia siempre estuvo involucrada en los deportes. Mi madre y mi tío eran nadadores profesionales y mi tío por parte de mi padre, fue campeón paralímpico en levantamiento de pesas y obtuvo el oro”, cuenta y reconoce que muchas personas le dijeron que perdía el tiempo en Instagram.
En la actualidad, Gabby Epstein suma ya más de 2.7 millones de seguidores en su perfil @gabbyepstein, pero eso no le ha robado el sueño ni la ha hecho perder su naturalidad. Lo mismo comparte una imagen suya en la playa o jugando tenis, que comprando comida chatarra o junto a su mascota.
“Tengo un sentido del humor muy sarcástico y no me importa burlarme de mí misma. Sólo se trata de Instagram: ¡no deberíamos tomarlo tan en serio!”, explica.
Añade, acerca de sus pasiones: “¡Toda mi vida he sentido una conexión muy fuerte con los animales! De hecho, quería ser veterinaria cuando era más joven. Mis hermanas y yo siempre tuvimos mascotas y yo tomé clases de equitación cuando era niña. River, mi perro, fue rescatado del comercio de carne de perro en Corea en 2020 y desde entonces, trabajo con muchos refugios en Los Ángeles. Me encantaría tener mi propio rancho de rescate de animalitos algún día”.
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