«Venimos a pedir justicia, justicia para Mariana. El dolor de nosotros es muy, muy grande, solamente queremos que se haga justicia”, dijo en conferencia de prensa Griselda Saavedra, familiar de la pequeña asesinada en Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas, mismos que se manifestaron en las afuera de Palacio nacional en la Ciudad de México.
De esa manera, familiares de la niña de 4 años Heidi Mariana, quien murió el pasado 31 de agosto a causa de una bala en la frontera norte de México, pesuntamente durante una persecución del ejército, pidieron al Estado mexicano una investigación exhaustiva, imparcial y urgente del caso, y que se haga justicia.
De acuerdo con la versión de los familiares, el pasado 31 de agosto la menor de edad sufrió un impacto de bala en la cabeza mientras era trasladada a un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en un vehículo porque tenía un fuerte dolor en el estómago.
En el auto viajaban la abuela de la pequeña, Adriana Araceli Rodríguez Guerra, el hermano de siete años y Griselda, quienes recibieron impactos de balas perdidas que hirieron a la abuela en el hombro derecho y a Heidi en la cabeza.
Según los familiares, tres unidades de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) supuestamente perseguían a civiles armados, por lo que los soldados abrieron fuego durante la persecución.
No obstante, pese a las pruebas y los videos que han presentado, los afectados criticaron que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, haya minimizado el caso y defienda a los militares.
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