El Papa Francisco pasó su primera noche ya en la Santa Sede después de estar internado 38 días, reportándose que descansó muy bien.
A pesar del alta, el sumo pontífice deberá permanecer en reposo, no debe hacer esfuerzos, no podrá convivir con grupos grandes de personas ni tener contacto con niños, ya que el tema de la infección que lo atacó aún no se ha eliminado por completo.
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