Los fanáticos más adinerados de la National Football League (NFL), para poder asistir a un Super Bowl, comúnmente no requieren de ningún sacrificio. Si su capricho es asistir al partido, con una simple llamada telefónica es suficiente para poder cumplir el capricho. Sin embargo, para el resto de los aficionados, no es tan fácil.
A pesar de lo que suceda en el emparrillado, mucho menos quien alce el trofeo Vince Lombardi, en el próximo domingo 11 de febrero, fecha del partido, ya está escrito en los libros de historia.
Con solo semana y media por delante para el kickoff, para poder asistir a Super Bowl LVIII, para poder comprar el boleto más accesible ronda alrededor de los 8,300 dólares en el mercado secundario.
Conforme a la página de reventa Tick Pick, el costo promedio de la entradas en el Allegiant Stadium de Las Vegas es de nada menos que de 10,976 dólares, lo que significa que convierte al gran juego, en el más costoso de la historia.
“Este es, por mucho, el (Super Bowl) más caro registrado”, mencionó Matt Ferrel, quien se trata del presidente de crecimiento de TickPick, quien reveló esto en la revista con el periódico Las Vegas Review-Journal.
”En 2021, cuando el estadio de Tampa Bay sólo estuvo al 33 por ciento de su capacidad debido a la pandemia de covid, el precio promedio fue de 7,000 dólares y ahora estamos por arriba de los 10,000 dólares”.
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