Con la inclusión de un quinto párrafo al artículo 260, del Código Penal Federal, se pretende castigar al ‘stealthing’, hasta con diez años de prisión en México, debido a los numerosos casos en proceso o ya castigados penalmente en el mundo y así sea considerado como violencia sexual, el acto de quitarse el condón, sin consentimiento, mientras se realiza el acto sexual.
“El stealthinges es considerado como una agresión sexual y consiste en que durante el acto sexual, una de las personas se retira el preservativo (condón) sin el consentimiento de la otra para continuar el acto sexual”.
En México, esta práctica, no consensuada, podría ser castigada hasta con una “pena de seis a diez años de prisión y hasta doscientos días multa”, de acuerdo a la propuesta legislativa presentada en le Senado de la República, en materia de stealthing, añade el que, “cometa el delito de abuso sexual quien ejecute en una persona, sin su consentimiento, o la obligue a ejecutar para sí o en otra persona, actos sexuales sin el propósito de llegar a la cópula”, también podría ser sancionado.
Además, “para efectos de este artículo se entiende por actos sexuales los tocamientos o manoseos corporales obscenos, o los que representen actos explícitamente sexuales u obliguen a la víctima a representarlos. (…) Si se hiciera uso de violencia, física o psicológica, la pena se aumentará en una mitad más en su mínimo y máximo”.
En otros países como Alemania, el Tribunal Superior de Schleswig-Holstein determinó que se considerará como agresión sexual el stealthing, incluso si la víctima no se percata de que no se utilizó el condón durante la relación sexual.
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