Este lunes 26 de agosto, la influencer Yoseline “N”, conocida en redes sociales como YosStop, fue detenida por segunda vez. Según el comunicado emitido por sus abogados, el arresto se produjo debido a un presunto “incumplimiento de medidas de protección vigentes”, relacionadas con un proceso legal en curso. La medida se fundamenta en la alegación de que YosStop violó estas medidas al compartir una publicación en su cuenta personal de Facebook.
La detención actual de YosStop no es un hecho aislado. En 2021, la influencer fue arrestada bajo acusaciones de pornografía infantil y pasó cinco meses en el penal de Santa Martha Acatitla. En esta ocasión, se alegó inicialmente que la detención estaba vinculada con el uso indebido de sus redes sociales para exhibir el supuesto robo de una socia. Sin embargo, los abogados de YosStop aclararon que su arresto reciente está relacionado con un proceso legal iniciado por una mujer que solicitó medidas de protección, las cuales incluyen la suspensión de las cuentas de redes sociales de la influencer.
Según el comunicado, la publicación en cuestión, relacionada con la venta de un departamento, fue realizada en su cuenta personal de Facebook, a la que sólo tienen acceso amigos cercanos y familiares. Los abogados argumentan que dicha cuenta y publicación no están vinculadas con las cuentas oficiales ni con los temas del caso en cuestión.
“Las medidas de protección solicitadas por la contraparte son injustificadas. Nunca existieron actos por los cuales nuestra cliente hubiera violado dichas medidas. Esta orden de arresto está vulnerando su derecho a la libertad de expresión y a su derecho al trabajo, ya que el contenido que genera en sus cuentas es su principal sustento económico”, se lee en el comunicado.
Reflexiones de YosStop sobre su tiempo en prisión
En una entrevista reciente con Saskia Niño de Rivera, YosStop ofreció una perspectiva íntima sobre su experiencia en prisión durante su primer arresto. La influencer describió la soledad y el aislamiento que vivió durante esos cinco meses, comparando su experiencia con situaciones cotidianas que considera un “privilegio”.
“Nunca te imaginas que vas a perder tu libertad, especialmente si no te dedicas a hacer cosas malas. Aunque la cárcel en la que estuve podría considerarse ‘privilegiada’, sigue siendo cárcel. Pasé mucho tiempo sola con mis pensamientos, tratando de no enloquecer ni deprimirme”, comentó YosStop.
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