Cuando parecía que el mundo había dejado atrás lo peor de la pandemia, una nueva variante del COVID-19 ha comenzado a encender las alarmas: Nimbus.
Su nombre oficial es NB.1.8.1, pero en la comunidad médica y científica ya es conocida por este nombre casi mítico, y no precisamente porque sea inofensiva. Detectada por primera vez a inicios de 2025, esta subvariante del virus SARS-CoV-2 ha comenzado a desplazar a otras variantes y a causar brotes importantes en distintas regiones del mundo.
¿Deberías preocuparte? ¿Es más peligrosa? ¿Cómo saber si la tienes? Aquí te lo explicamos todo.
¿Qué es la variante Nimbus y dónde ha aparecido?
Nimbus es una subvariante derivada de Ómicron, la misma que dominó gran parte del mundo durante 2022 y 2023. Sin embargo, lo que hace a NB.1.8.1 particularmente preocupante es su rápida capacidad de contagio y su presencia creciente en países como China, Hong Kong, India, Reino Unido y Estados Unidos.
De acuerdo con datos recientes, en solo unos meses Nimbus pasó de representar apenas el 2 % de los casos secuenciados a alcanzar el 11 % a nivel global. En algunas zonas de Asia y California, incluso ya ha superado a otras variantes anteriores. Por eso, aunque todavía no hay indicios de que provoque enfermedades más graves, la OMS la ha incluido en su lista de «variantes bajo monitoreo».
¿Por qué es más contagiosa?
La razón detrás de su mayor transmisibilidad está en las mutaciones en la proteína Spike, la «llave» con la que el virus entra a las células humanas. Estas modificaciones permiten que Nimbus se adhiera más fácilmente y con mayor eficacia, haciendo que se propague más rápidamente entre personas.
Otra de sus capacidades es la parcial evasión de anticuerpos, lo que significa que puede infectar incluso a quienes ya tuvieron COVID o están vacunados. Sin embargo, la buena noticia es que, según estudios recientes, las vacunas actuales siguen siendo efectivas, con solo una leve disminución en su eficacia.
¿Cuáles son los síntomas de la variante Nimbus?
Nimbus presenta síntomas muy similares a los de otras variantes de Ómicron, aunque hay una señal particular que ha llamado la atención en todo el mundo: el dolor de garganta extremo. Tanto pacientes como médicos lo describen como un “dolor de garganta tipo navaja” o como si alguien pasara pequeñas cuchillas al tragar.
Este síntoma ha sido reportado en Reino Unido, India y Estados Unidos, y se ha convertido en una de las señales más características para identificar esta subvariante. Además del dolor en la garganta, otros síntomas comunes incluyen:
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Fiebre
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Tos
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Congestión nasal
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Escalofríos
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Cansancio general
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Dolores musculares
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Voz ronca o garganta irritada
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Malestares digestivos (como náuseas, vómitos o diarrea, en algunos casos)
En personas vacunadas o con infecciones previas, la mayoría de estos síntomas tienden a ser más leves, aunque el ardor en la garganta suele ser mucho más molesto que en variantes anteriores.
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