Inició la gira Olé México en el Auditorio Nacional donde se dieron cita cantantes de la talla de
Pitingo, Buika y como invitada especial Eugenia León quienes deleitaron a los casi 10 mil asistentes
con canciones que han hecho historia pero que ahora se presentaron con nuevos arreglos y la
dirección musical de la orquesta Sinfónica de Minería bajo la batuta de Alondra de la Parra.
Con la intención de dar a conocer el fuerte vínculo que existe entre México y Madrid fue que
Mané de la Parra tuvo la idea de realizar primero un disco que reviviera las canciones mexicanas
que han sido conocidas en la Madre Tierra pero de una forma especial, con nuevos arreglos “de tal
manera que la gente al escuchar las primeras notas, no supiera de qué canción se trata”, tal como
lo apuntó Alondra de la Parra.
Mané platicó esta idea a su hermana Alondra a quien le encantó la propuesta que dio por
resultado que ella se encargara de dirigir a la Orquesta Sinfónica de Minería en esta gira que inició
este 11 de diciembre en el Auditorio Nacional donde se contó con las increíbles voces de los
españoles Pitingo, Buika y como invitada especial Eugenia León.
La gira que ha sido nominada para dos Latin Grammy en la categoría de mejor arreglo musical:
Cucurrucucú Paloma de Pául Rubinstein y ´Adoro´ de Marco Antonio Godoy, inició en la Ciudad de
México y continuará en Monterrey, Guadalajara, Puebla, Mérida y Acapulco el 26 de diciembre en la Arena GNP Seguros.
El disco OLÉ MEXICO GNP se lanzó en febrero de este año y que cuenta con las voces de Pitingo,
Buika y Lila Downs (quien recientemente sufrió la pérdida de su esposo), contiene éxitos como
Cucurrucucú, Adoro, La Mentira, Paloma Negra, Amor Eterno, El Andariego, Échame a mí la culpa,
No, Granada, Cuando vuelva a tu lado, Sabor a mí, Hasta que te conocí.
La gala que fue dirigida prodigiosamente por Alondra comenzó a las 18:00 horas, contó con un
intermedio de aproximadamente 20 minutos, al regreso tanto Eugenia como Pitingo y Buika
cuando aparecieron nuevamente se presentaron con cambio de vestuario, lo que provocó que de
la Parra hiciera una broma de que la única que no se había cambiado era ella y que le dieran unos
minutos para hacerlo porque nadie le había dicho nada.
Ya al cierre del concierto , el público coreó la clásica «ótra», «otra», por lo que Alondra amablemente
y con gran alegría retomó la batuta mientras de fondo se escuchaban las primeras notas de
Huapango, un clásico que no falta en su repertorio, lo cual, al final fue ovacionada de pie.
Por Mary Paz Hernández
Foto: Ayelén Laguna
Colaboradoras en la CDMX
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